Vistas de página en total

9 ene 2017

Salmos 32:1-2 Dichoso aquel a quien se le perdonan sus transgresiones, a quien se le borran sus pecados. Dichoso aquel a quien el Señor no toma en cuenta su maldad y en cuyo espíritu no hay engaño.

Todos hemos escuchado que es mejor dar que recibir.  Sin embargo, siguen siendo pocos los que dan.  También sabemos que debemos perdonar.  Tristemente, hay muchos pleitos que siguen sin resolverse porque no soltamos nuestro enojo.  Podemos tener conocimiento de muchas cosas, pero ese conocimiento no sirve de nada hasta que es puesto en práctica.  Casi todos citan a Dios en sus ceremonias de matrimonio.  Se cita 1 Corintios y la definición del amor.  Pero la gente se sigue divorciando.  Medita un momento en tu vida.  ¿Cuántas cosas sabes y cuántas llevas a la práctica?  Ahora que empieza el año, muchos comienzan con propósitos.  Sabemos que necesitamos comer mejor y hacer ejercicio para estar más saludables.  Lo difícil es hacerlo constantemente.  Bien.  Ahora te pido que vuelvas a leer el pasaje.  Con calma.  Todos somos pecadores.  Ninguno de nosotros está exento.  Todos necesitamos del perdón de Dios.  La biblia nos dice que Cristo vino a morir por nosotros.  Vino para que no seamos más esclavos al pecado y podamos vivir libres.  Esto es lo que sabemos.  Dios te ama.  Dios quiere tener comunión contigo.  Dios mandó a su Unigénito para que a través de Él tengamos una relación con el Padre.  ¿Qué debemos poner en práctica?  Arrepentirnos y pedir perdón por nuestros pecados para disfrutar la bendición que se describe en los versículos 1 y 2.  Pon atención: hay bendición para aquellos que se les perdonan sus pecados, hay bendición para aquellos que se borra lo que han hecho, hay bendición para los que no engañan.  ¡Bendición!  Quiere decir que es para tu propio bien.  Dios te está diciendo que quiere recibirte y escuchar todo lo que has hecho para perdonarte y bendecirte.  ¿Sabes qué te está diciendo Satanás?  No lo hagas.  Sigue tu camino.  No mereces perdón.  Lo que has hecho no tiene solución.  Ahora no es el momento.  Como siempre lo he dicho, Satanás existe y busca interrumpir cualquier acercamiento que queramos tener con Dios.  Buscará engañarte.  Buscará hacerte sentir mal.  Querrá hacerte pensar que puedes seguir tu propio camino y que a Dios no le interesa tu vida.  Hoy te comparto que esto no es así.  Dios no necesita que seas una mejor persona para acercarte a Él.  No hay pecado que no pueda ser perdonado.  No hay acción que haga que Dios deje de amarte.  Lee el pasaje.  Es muy claro.  ¡Dios quiere bendecirnos!  ¡Quiere traer dicha a tu vida!  Esto es lo que sabemos.  ¿Qué debemos hacer?  Pedir perdón.  Arrepentirnos.  Doblar nuestro orgullo.  Doblar nuestra rodilla.  Rendir nuestro corazón ante el Todopoderoso.  ¡Por favor!  No te quedes con el conocimiento.  ¡Da el siguiente paso!  Las bendiciones están esperándote.  No esperes más y has esta oración.

Oración

Señor: vengo a tus pies, con el corazón humillado a reconocer que Tú eres Dios y tu Hijo es Cristo.  Vengo a pedirte perdón por mis pecados.  Perdón por todo lo que he hecho.  Perdóname.  No quiero seguir igual.  Hoy entiendo que hay otro camino y quiero tomarlo.  Quiero poner en práctica lo que he aprendido y recibir tus bendiciones.  Recíbeme Señor.  Toma mi vida.  En el nombre de Jesús.  Amén

3 ene 2017

Joel 2:12-13 “Ahora bien, afirma el Señor, vuélvanse a mí de todo corazón, con ayuno, llantos y lamentos”. Rásguense el corazón y no las vestiduras. Vuélvanse al Señor su Dios porque Él es bondadoso y compasivo, lento para la ira y lleno de amor, cambia de parecer y no castiga.

Esta mañana empecé a leer el libro de Joel y me sorprendió cuando llegué a estos dos versículos.  Venía de terminar Ezequiel quién anuncia castigo a Israel y, junto con el primer capítulo de Joel, vemos a un Dios enojado con un pueblo que lo ha abandonado y listo para traer juicio y justicia.  En medio de esto, encontramos estos pasajes maravillosos.  ¿Sabes?  Hay gente que dice que el Dios del antiguo testamento es distinto al del nuevo testamento.  Hay quien dice que no hay relación entre lo que se predica en uno y en otro.  ¿La realidad?  Esas personas no han leído ni estudiado un poco para darse cuenta de lo equivocadas que son sus posturas.  ¿Qué característica resalta de Dios en este pasaje?  Su gran amor y misericordia.  ¿Qué características refleja cuando manda a su Unigénito?  Amor y misericordia.  ¿Qué características presenta cuando leemos el Apocalipsis?  Amor y misericordia.  ¿Te quedó alguna duda?  Es el mismo Dios.
Hoy quise escribir sobre este pasaje para traer esperanza a tu vida.  Dios me habló y estoy seguro que necesitas escuchar este mensaje.  Hay demasiados problemas allá afuera.  Gente muriendo de hambre, suicidios, homicidios, violencia intrafamiliar, soledad, depresión y guerras entre otras cosas.  ¡Necesitamos esperanza!  ¡Necesitamos de la única Roca que nos puede dar estabilidad!  ¡Necesitamos de la fuente de Vida Abundante!  ¡Necesitamos de la paz que no se agota!  ¡Necesitamos de un amor perfecto, incondicional que todo lo puede!  En pocas palabras: necesitamos de Jehová.  Sin importar lo que estés atravesando, has una pausa.  Respira.  Vuelve a respirar.  Lee nuevamente el pasaje y pon atención al amor tan increíble de Dios y lo que busca de ti y de mí.  No importa cuánto le hayas fallado.  No importa lo perdido que estés.  No importa lo bajo que hayas caído.  Satanás está queriendo aplastarte señalándote y haciéndote pensar que no mereces nada y que todo lo haces mal mientras que Jehová quiere recibirte con los brazos abiertos y amorosos.  Quiere que sepas que en Él hay esperanza.  Que en Él hay descanso.  Que en Él hay paz como en ningún otro lado.  Tu pecado puede ser grave.  Su amor es más grande y el sacrificio de Cristo es perfecto.  No tienes que ser “bueno” para venir a Él.  Claramente dice el versículo que necesitas venir desgarrando tu corazón.  Con humildad.  Entendiendo tu necesidad de Él.  Reconociéndole como Señor, Rey y Salvador.  Él es bondadoso, compasivo, lento para la ira y lleno de amor.  ¡Ese es Dios!  Ese Dios quiere tener comunión contigo.  Ese Dios quiere ser tu Dios.  Quiere ser tu guía.  Quiere ser tu todo.  No permitas que tus acciones y circunstancias te hagan pensar que no puedes acercarte a Él.  Escúchalo bien: Él murió por ti y quiere tener una relación contigo.

Oración
Padre: Gracias.  No merezco este amor y sin embargo Tú no dudas en derramarlo sobre mí.  Gracias por ser compasivo y bondadoso.  Gracias por permitirme venir a Ti y reconciliarme contigo.  Perdona mis pecados.  Perdona todo lo que he hecho en tu contra y guíame por un nuevo camino: tu camino.  Transforma mi corazón.  Ven a vivir en mi vida y reina sobre todo lo que haga.  Te lo pido en el nombre de Jesús.  Amén


12 dic 2016

Salmos 31:23-24 Amen al Señor todos sus fieles; Él protege a los dignos de confianza, pero a los orgullosos les da su merecido. Cobren ánimo y ármense de valor todos los que en el Señor esperan.


Personalmente, me gusta tratar de descifrar a Dios.  Dentro de mi personalidad, me gusta analizar y conectar puntos para encontrar patrones que se alinean y me permiten entender mejor las cosas.  Con Dios, muchas veces lo he logrado, pero no deja de sorprenderme abriendo nuevos caminos y conectando puntos nuevos.  ¿Por qué digo esto?  Porque cuando leo pasajes como el de hoy, pienso: a qué se refiere con proteger a los que le aman y son fieles; comienzo a analizar las distintas opciones para que Dios me proteja.  ¿Me protege de enfermedades?  ¿Me protege del sufrimiento?  ¿Me protege de la bancarrota o de que nunca me despidan de un trabajo?  ¿De qué me protege?  ¿De qué protege a sus fieles?  La gente sufre.  Tanto seguidores de Cristo como enemigos.  ¿A qué se refiere Dios cuando me dice que me protege?  Tristemente hay gente que se aprovecha de estos versículos y los “venden” para su propio beneficio.  Le dicen a la gente que den de su dinero y Dios los protegerá, pero no explican de qué los protegerá.  Por esta razón resulta de suma importancia estudiar minuciosamente la biblia y no dejar que nos confundan o engañen.  Mateo 6:19 y Lucas 12:32 nos dicen: no acumulen para sí, tesoros en la tierra donde la polilla y el óxido destruyen y donde los ladrones se meten a robar.  Más bien, acumulen para sí, tesoros en el cielo.  Estos pasajes nos ayudan a entender mejor el Salmo de hoy.  Si Dios nos está diciendo que no nos preocupemos por los tesoros terrenales, entonces no tiene sentido que nos proteja para que no le pase nada a esos tesoros.  ¿Lo puedes entender?  ¿Para qué nos protegerá Dios de no perder la salud o dinero si al final nos dice que lo importante son los tesoros del cielo?  ¿Esto quiere decir que Dios no nos quiere curar?  No.  ¿Quiere decir que Dios no me va a prosperar?  No.  Simplemente quiere decir que, su principal objetivo al decir que nos protege, no está necesariamente en hacerlo con lo material.  Ahora, si recordamos el libro del Éxodo capítulo 14, hay un momento en el que el pueblo de Israel se encuentra frente al mar sin poder avanzar más, desierto de los dos costados y detrás de ellos todo el ejército egipcio persiguiéndolos para matarlos o someterlos nuevamente a esclavitud.  En ese momento, Dios le dice a Moisés que levante su vara y el mar se divide en dos quedando totalmente seco el camino por donde cruzaría todo el pueblo judío.  Este es otro ejemplo de cómo Dios nos protege en lo “material”.  ¿Entonces?  Justamente por eso escribí al principio lo complicado que resulta querer encasillar a Dios y pensar que conocemos todos sus movimientos.  Lo que puedo concluir es lo que dice en el versículo 24: cobren ánimo y llénense de valor los que creen en Él.  Ya sea que tengamos un problema material, psicológico, de salud o de cualquier otro tipo, Dios quiere que tengas ánimo.  Dios quiere que sepas que está ahí a tu lado y entiende tus sentimientos.  Él quiere consolarte y llenarte de su paz.  Quiere protegerte de Satanás quién busca destruir tu relación con Él y hacerte pensar que no mereces nada.  Sea cual sea tu situación, Dios puede protegerte.  No puedo decirte que nos dará lo que queremos o esperamos porque sería mentir y cambiar el evangelio, pero lo que sí puedo decirte es que, conforme a su voluntad, Él te cuidará en cada segundo que pase y no habrá nada que pueda evitarlo.

Oración

Padre: ¡Gracias!  Vengo a tus pies con gozo al leer que me cuidas, me amas y me quieres llenar de tu paz.  Tu conoces mis problemas.  Tu conoces mis miedos y todo lo que roba mi paz.  Te pido me protejas y que tu Espíritu me llene de paz y gozo.  Te pido me llenes de tu amor para que pueda salir adelante de cualquier circunstancia.  Perdona mis pecados y no permitas que me aparte de Ti.  En Cristo Jesús.  Amén.