1ª Corintios 6:20

1ª Corintios 6:20
Porque habéis sido comprados por precio; glorificad pues, a Dios en vuestro cuerpo y en vuestro espíritu, los cuales son de Dios.

¿Quiénes han sido comprados?
Aquellos que han aceptado a Cristo como su Señor y único Salvador. No es suficiente con creer en Dios, es necesario aceptarlo y confesarlo (1Juan 4:15).
Y ¿dónde estaba antes de que fuera comprado por Jesús?
La Biblia describe que estabas en tinieblas. Tu pecado no te permitía tener relación con Dios y por consecuencia no tenías su luz.
Estas palabras me hacen darme cuenta lo fácil que es olvidar lo que Dios hizo por mí.
¡Cristo pagó por mis pecados!
Puede ser que se te olvide después de un tiempo que alguien te haya ayudado en algo, pero olvidar que fuiste rescatado del infierno, que tus pecados fueron perdonados y que la vida de Cristo fue entregada para ello, ¡ESO NO SE OLVIDA!
Le pido perdón a Dios por no tener tan presente estas palabras como debería.
Si Dios me compró, ¿quiere decir que ahora El dirige o gobierna sobre mi vida?
Sí.
Cuando compras algo, significa que tienes los derechos sobre aquello que has comprado. ¿Te acuerdas de cómo se trataban a los esclavos? Aquellos que compraban esclavos pensaban que podían hacer lo que quisieran con ellos pues al haberlos COMPRADO adquirían los derechos sobre esas personas.
Dios no quiere imponerse en tu vida y ponerte una pared para que gires a la izquierda y luego te va a caer un rayo para que no avances más. En su amor te dio la libertad de decidir y en su misericordia pagó por ti.
Lo único que puedo pensar es que debo humillarme ante la grandeza de Dios.
Vuelve a leer el versículo hasta que pueda penetrar a lo más profundo de ti.
La vida de Cristo pagó por tus pecados. ¿Lo merecías? Definitivamente NO.
¿Cómo seguir gobernando tu vida conforme a tu voluntad cuando Dios te compró?
No se puede.
Con este versículo puedes entender por qué no tienes paz en tu corazón. Si no vives agradecido de haber sido comprado por Jesús, si no has dejado de gobernar tu vida y cedido tu trono a aquél que pagó por tu vida, NO PODRÁS vivir en paz.
Tu cuerpo y tu espíritu YA NO TE PERTENECEN. Le pertenecen a Dios. El quiere que los utilices para darle gloria. ¿Para qué utilizas el cuerpo que el Señor te dio y compró? ¿Cómo lo cuidas? ¿Te preocupas por que tu cuerpo de Gloria a Jehová?

Oración
Dios: perdóname. Tu grandeza es incomprensible y tu amor aún más. Gracias por haberme comprado, gracias por que ahora puedo hablarte y sé que me escuchas, gracias por haber tenido misericordia de mí. Ahora te entrego mi corazón y mi cuerpo para que mi vida pueda darte la gloria que te mereces. Guíame a una vida que sea agradable para ti. Te lo pido en el nombre de Jesús.
Amén