Apocalipsis 3:17
Porque tú dices: Yo soy rico, y me he enriquecido, y de ninguna cosa tengo necesidad; y no sabes que tú eres un desventurado, miserable, pobre, ciego y desnudo.

Te recomiendo, si tienes oportunidad de leer el capítulo completo.
¿Recuerdas que hace tiempo existió una novela llamada “los ricos también lloran”? La verdad es que yo no la ví pero el título me dice mucho.
Existe una idea de que la plenitud de la vida, se puede alcanzar a través de bienes materiales. MENTIRA.
Los ricos son humanos. Los pobres TAMBIÉN. Los que ríen, los que lloran, los enfermos, los sanos, TODOS son humanos y tienen los mismos sentimientos y NECECIDADES que tú y yo. Una persona NO es más feliz por tener dinero o salud. ¿Lo sabías? ¿Lo entiendes?
Si de verdad lo entiendes ¿por qué te preocupa el dinero? Dios es quien provee.
Este versículo me muestra lo importante que es estudiar la Biblia y conocer la visión y el concepto que Dios quiere que yo tenga.
Compara este versículo con lo que has aprendido en el mundo…
La riqueza no cubre todas las necesidades. Grábate este principio.
Lo que más me sorprende del versículo es cómo podemos darnos cuenta de la manera en que Dios ve las cosas. Como humanos vemos un hombre rico, con familia, una linda casa, buen trabajo, buenas vacaciones, en general todo parece ir muy bien. Por el contrario, Dios lo que ve es una persona miserable, pobre, ciega y desnuda.
¿Te das cuenta de la gran diferencia en percepciones?
¿Pero por qué Dios lo ve así? ¿Cómo saber si Dios te ve así?
Simple. Estas personas son aquellas que NO se han arrepentido de sus pecados, que han escuchado la Palabra de Dios y siguen sin reconocer sus faltas y necesidad de Dios, aquellos que no quieren COMPROMETERSE con el Señor.
Una persona que no ha aceptado a Cristo está totalmente ciega, desnuda y su vida es miserable.
Que dura es la palabra del Señor.
Unos versículos más adelante Dios muestra su amor y dice que está llamando a tu puerta para que dejes de vivir como un desventurado, miserable y pobre. Esa puerta es la de tu corazón. Jehová es un Dios amoroso, justo y misericordioso. Si bien es duro contra los que se rebelan, Él ama y conoce a los que se arrepienten. Hoy es tu momento y oportunidad para decidir qué vida quieres llevar. Qué necesidades quieres satisfacer, las del cuerpo o las del espíritu. ¿Quieres tener una vida plena o prefieres seguir en la oscuridad? Nadie te va a obligar a decidir. Eres tú y Dios. Solos. Ponte a cuentas con El.

Oración
Señor: perdona mi rebeldía. Perdón por mis pecados. Creía que tenía muchas cosas pero con tu palabra me doy cuenta que en realidad estoy vacío. Las riquezas ni nada pueden llenar mi vida más que Tú viviendo en mí. Te pido que vivas en mi corazón y permitas que tenga una vida diferente y plena. En el nombre de Jesús te lo pido.

Amén