Solamente existen dos tipos de
estado: atravesando pruebas y pruebas atravesadas. No es un misterio ni estoy hablando de
encontrar el hilo negro. Piénsalo. La vida es una especie de montaña rusa donde
por momentos todo parece estable pero en realidad lo que viene adelante será
complicado. Esto debe hacernos meditar
sobre dónde ponemos nuestra esperanza. Si confiamos en el Señor, y dejamos que Él sea
nuestra fuerza y nuestro escudo, entonces no debe llenarnos de temor sino de
esperanza y gozo. Por el contrario, si
seguimos pensando que nosotros podemos salir adelante por nuestros propios
recursos, entonces sí, la incertidumbre debe ponerte a temblar. Puedes estar pensando que estoy siendo
simplista y optimista pero te voy a explicar por qué no es cierto. Científicamente se ha tratado de explicar el
origen del ser humano y del universo.
¿Sabes a qué conclusión llegan? A
que forzosamente debe haber existido un Acto (como le llama Aristóteles), que
pudiera originar todo lo que hoy conocemos.
Es decir, la teoría del Big Bang reside en que tuvo que haber una partícula
que originara todo. En la biblia,
claramente sabemos quién es esa “partícula”.
Se llama Jehová. Él existió antes
de todo y lo creó todo. Mientras la
gente piensa que la ciencia niega la existencia de Dios, la realidad es todo lo
contrario, la confirma. Por esta razón,
podemos estar convencidos que la palabra de Dios, que encontramos en la biblia,
no solo es real sino viva y eficaz para dirigir nuestros pasos
diariamente. Al leerla, no estamos
confiando en los pensamientos de algunas personas que fueron brillantes y nos
dejaron sus diarios para aprender de sus errores. Tampoco estamos leyendo un libro de historia
o una novela. Al leerla, estamos
escuchando a Dios mismo hablarnos a través de ella. Te voy a dar otro ejemplo: estudios
recientes, sin relación a lo espiritual, muestran que, cuando una pareja lucha
por su matrimonio, cinco años después se encuentra más feliz, mejor
económicamente y más saludable en comparación con aquellas que decidieron
separarse. ¿Qué dice la biblia? Que el Señor aborrece el divorcio. Que no nos separemos de nuestras
parejas. Pero somos soberbios y pensamos
que sabemos más que Dios y necesitamos que la “ciencia” confirme lo que
hacemos. Pues bien, el día de hoy, te
invito a que pongas a prueba todos tus conocimientos y métodos para salir
adelante. Medita sobre dónde estás
parado y dónde te han llevado tus decisiones.
¿Eres feliz? ¿Tienes
esperanza? ¿Te sientes protegido? ¿Tienes gozo?
La respuesta es simple: sí o no. Todos
aquellos que hemos puesto nuestra vida a los pies del Señor podemos, como dice
el versículo, cantar y darle gracias a Dios por cómo nos guarda, nos ama y nos
llena de esperanza mientras que las circunstancias son abrumadoras. Por el contrario, cuando uno no tiene a
Jehová en su vida, simplemente no tiene a qué aferrarse y se hunde dentro de su
propio orgullo. La meditación de hoy
busca llevarnos a reconocer la veracidad de la biblia, a reconocer la
existencia de Dios y a entregar nuestra vida a Él, como David lo hizo para
poder decir: Jehová es mi fuerza, mi escudo y mi ayuda.
Oración
Padre: Tú eres mi todo. Hoy veo cuántos errores he cometido y a dónde
me han llevado y no quiero seguir así.
Toma mi vida Señor. Te pido
perdones mis pecados y traigas luz a mi oscuridad. Trae esperanza a mi desesperación y paz a mi
caminar. Confío en Ti y te pido seas mi
escudo, mi fuerza y mi ayuda. En Cristo
Jesús. Amén.
3 comentarios:
AMÉN. Por siempre mi Amado y eterno Dios Todopoderoso.
Hermoso
Gracias por sus comentarios y gloria a Dios que nos guía siempre.
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