Hebreos 11:27

Por la fe (Moisés) salió de Egipto sin tenerle miedo a la ira del rey, pues se mantuvo firme como si estuviera viendo al Invisible. 

El versículo exalta la fe de Moisés, sin embargo, cuando leemos el pasaje completo en Génesis 3 y 4, nos damos cuenta que Moisés puso muchas trabas al llamamiento de Dios.  Mientras Jehová le decía algo, Moisés lo cuestionaba.  Jehová contestaba y Moisés volvía a cuestionar.  Entonces ¿por qué tenemos a Moisés como un ejemplo a seguir?  ¡Porque así es el crecimiento espiritual!  No existe ningún ser humano que de un día para otro su vida es espiritualmente perfecta.  David fue asesino del esposo de la que se convertiría en su esposa.  Pablo persiguió a la iglesia y probablemente no solo presenció sino que aceptó el asesinato de Esteban.  Después de esto se convirtió en apóstol.  No dejes que Satanás te aplaste haciéndote sentir que no vales nada.  No te dejes engañar pensando que no hay forma de corregir tu vida.  Moisés dudo y cuestionó lo que Dios pedía pero no se quedó ahí.  Poco a poco fue creciendo y madurando para convertirse en el ejemplo que hoy recordamos.  Ahora, el hecho de que uno debe ir madurando, no quiere decir que lo que estás atravesando hoy sea demasiado para ti.  ¡Al contrario!  Es justamente lo que necesitas para dar el primer paso y comenzar una vida en la fe.  Si ya diste el primero, es simplemente uno de muchos que debes seguir dando para ser perfeccionado.  Piénsalo.  Dios no sacó al pueblo de Israel de Egipto inmediatamente.  Dejó no solo que Moisés madurara sino que el pueblo entero viera cómo su mano estaba con ellos.  Por eso debemos utilizar las pruebas y cada momento difícil para poder afianzar y fortalecer nuestra comunión con Él.  Es justamente en las situaciones complicadas cuando podemos poner en práctica nuestra fe.  Imita a Moisés.  Me encanta la descripción del versículo que dice: se mantuvo firme como si estuviera viendo a Jehová (el Invisible).  ¡Así debemos andar!  Firmes.  No en nuestras fuerzas.  No en nuestros contactos.  No en nuestras cuentas bancarias.  Firmes porque tenemos la mirada fija en el Invisible.  El Rey de reyes.  El Todopoderoso.  El Alfa y la Omega.  El que es.  ¿Te das cuenta de lo grande que es Dios y lo maravilloso que es poder confiar y entregarle todo?  Sabiendo quién es nuestro Rey, ¿cómo conformarnos con una cuenta bancaria para traer fe a nuestra vida?  Teniendo al Todopoderoso como mi Padre ¿cómo confiar en mis habilidades para mi vida laboral?  Moisés no se puso a preparar un ejército para salir de Egipto.  No buscó estrategias para su escape.  No buscó aliados que pudieran apoyarlos o incluso recibirlos.  Simplemente tuvo fe en lo que Jehová dijo y obedeció.  ¿Qué más queremos?  Tenemos la palabra de Dios y sabemos que es fiel.  ¿Por qué seguir confiando en nosotros o lo que nos ofrece este mundo?  ¡No tiene sentido!  Así como Moisés salió de Egipto sin temer lo que faraón haría, es tiempo de crecer y dar nuestro siguiente paso para madurar espiritualmente sin temer a lo que pueda pasar.

Oración

Señor: no quiero estar estancado sino quiero crecer en mi comunión contigo.  Quiero crecer mi fe y ponerla por práctica constantemente.  Perfeccióname.  Límpiame.  Guíame.  Toma mi vida y perdona mis pecados.  En Cristo Jesús.  Amén