Vistas de página en total

5 jun 2008

Josué 3:5



Y Josué dijo al pueblo: Santificaos, porque Jehová hará mañana maravillas entre vosotros.



Después de que los espías regresan de Jericó, le informan a Josué que Jehová ha entregado esa tierra al pueblo de Israel. Posteriormente, Josué le dice estas palabras a la gente.
Dios había prometido entregar la tierra prometida y estaba cumpliendo con su promesa. Pero para poder continuar con su plan era necesario que los israelitas hicieran algo muy importante: SANTIFICARSE.
Este pasaje me hace llegar a una conclusión crucial en la vida cristiana: Dios NO puede trabajar en tu vida si no te SANTIFICAS antes.
¿No te has preguntado por qué tu vida no cambia?
El problema no son los demás. Tampoco las circunstancias. El problema es el orgullo de tu corazón que no quiere ser santificado.
Ahora te debes preguntar, ¿cómo me santifico y qué significa santificarme?
La palabra utilizada en el hebreo significa “ser LIMPIO”.
Una persona es limpia cuando RECONOCE que ha pecado y pide a Cristo que lo LIMPIE de esos pecados. Esos pecados a su vez, son limpiados a través del sacrificio que realizó Jesús al morir por aquellos que lo reconocerían como Salvador.
Entonces, cuando quieras que Dios transforme tu vida, primero ve y ponte a cuentas con El. Pide perdón. Pide ser santificado. Y después de esto podrás ver las maravillas que tiene para ti. Esto también se debe aplicar en cada momento que vayas a tener comunión con Dios. Primero pide ser limpiado, después ora al Señor.
Tal vez te parezca muy sencillo u obvio lo que estás leyendo, pero si puedes humillar tu corazón y ser sensible a la palabra de Dios estoy convencido que te podrá mostrar muchas áreas de tu vida que necesitan ser santificadas para poder continuar con la perfección de tu ser.
Por alguna razón nos gusta seguir siendo como somos o cambiar en aquellos aspectos que consideramos necesarios. Dios quiere hacer MARAVILLAS en tu vida pero en las áreas que El ha decidido, NO en las que tú quieres.
Hace muchos años Dios le pidió al pueblo de Israel que se LIMPIARA, que fuera Santo para poder hacer MARAVILLAS y mostrar su amor, poder y soberanía. Hoy, es necesario que tú hagas lo mismo. Dobla tu rodilla, humilla tu corazón y reconoce tus faltas, después, disfruta de tu relación con el Señor pues podrá comenzar sus maravillas en ti.

Oración
Señor: quiero pedirte que me limpies de mis pecados. Quiero ser santificado y dejarte trabajar en mi vida. Quiero ver tus maravillas en mi vida. Quiero ser transformado por ti. Reconozco que hay muchas áreas que no te quiero entregar y te pido porque puedas quitar mi orgullo y puedas empezar a trabajar en mí. Gracias por tu amor incondicional. Te pido escuches mi oración, en el nombre de Cristo.
Amén

4 comentarios:

Omar Solís dijo...

Amén, excelente mensaje, lo voy a poner en práctica. Muchísimas gracias hermanos por su esencial aporte . Que Dios los continúe Bendiciendo.

Unknown dijo...

AMÉN ASÍ ES PADRE AYUDAME A SANTIFICARME RECONOZCO QUE PECADORA SOY YO QUE TU HAS ENVIADO A TU HIJO JESUCRISTO PARA LA SALVACIÓN DE MI ALMA Y PARA EL PERDON DE MIS PECADO ME ARREPIENTO SEÑOR DE TODAS MIS TRANSGRECIONES BORRA DE TUS PENSAMIENTOS MIS ERRORES PADRE TE LO PIDO EN EL NOMBRE DE JESÚS AMÉN GLORIA A DIOS GRACIAS JESÚS 😃 BENDICIONES

Unknown dijo...

RECONOZCO QUE PECADORA SOY Y QUE TU HAS ENVIADO A JESUCRISTO Y CONFIESO CON MI BOCA QUE JESÚS ES EL UNICO SEÑOR Y SALVADOR DE MI VIDA......

Unknown dijo...

Bendiciones mi hermano,amen..que Dios me lo bendiga..