Vistas de página en total

25 mar 2013

Filipenses 4:18-19


Ya he recibido todo lo que necesito y aún más; tengo hasta de sobra ahora que he recibido de Epafrodito lo que me enviaron.  Es una ofrenda fragante, un sacrificio que Dios acepta con agrado.  Así que mi Dios les proveerá de todo lo que necesiten, conforme a las gloriosas riquezas que tiene en Cristo Jesús.  



Recientemente vi un documental sobre relaciones entre tres personas.  No se llamaban polígamos pues no eran relaciones “abiertas”.  Una de las razones que explicaba uno de los entrevistados por la cual pensaba que era bueno lo que hacía era: cómo puedo detener a mi pareja de hacer lo que le llena y causa placer.  La verdad es que suena sumamente romántico pero si lo analizamos fríamente, lo que en realidad quiere decir es: no me eres suficiente ni llenas mi vida, necesito algo o alguien más.  Así vivimos.  Necesitando “algo más”.  ¡Qué palabras las de Pablo cuando dice: tengo todo lo que necesito y hasta de sobra!  ¿Cuándo vamos a decir esto nosotros?  Cuando compremos una casa?  ¿Cuando ganemos más dinero?  ¿Cuando regrese la salud?  ¿Cuando encontremos una pareja?  ¿Cuando nuestro negocio funcione?  ¿Cuándo?  ¿Cómo podemos llegar al punto en el que no necesitemos nada más?  ¿Cómo podemos decir que tenemos de sobra?  La respuesta es sencilla, cuando ponemos la lista de lo necesario conforme a los parámetros del Señor.  Podría utilizar este pasaje y decirte todo lo contrario.  Podría decirte que imagines lo que significa que Dios te proveerá de todo lo que necesites conforme a sus riquezas.  Podría hacer que te emociones y pienses en todo aquello que podrían ser las riquezas del Señor para ti.  Pero eso sería engañarte.  Eso sería hablar de un evangelio distinto.  La palabra es muy clara.  Dios nos proveerá de lo que necesitemos.  Sí.  Pero Él decide aquello que necesitamos.  ¿Lo entendiste?  Te lo repito.  Dios te dará todo lo que necesites conforme a Su voluntad.  Muchas veces pensamos que Dios está ahí para cumplir con nuestros deseos.  Utilizamos sus promesas y las transformamos en compromisos para darnos aquello que nosotros consideramos necesario para decir: tenemos todo.  Pero la realidad es que ese momento nunca llega.  ¿Esto quiere decir que no debemos desear otras cosas?  No.  Quiere decir que debemos aprender a gozar y disfrutar lo que el Señor nos da.  Debemos entender que tenemos todo lo que necesitamos.  Sí.  Todo.  Aunque pienses que te hace falta algo, hoy, debes entender que tienes lo que necesitas.  Si aún no estás convencido, has una pausa y medita sobre aquello que consideras deberías tener para estar “completo”.  A la luz de la biblia, ¿Realmente es prioridad?  ¿Qué te puede enseñar el no tener?  
Es fácil pasar por alto todo lo que el Señor nos da y querer aún más.  No caigas en esta mala rutina.  Aprende a vivir agradecido.  Aprende a dar gracias y gloria a Dios por lo que hoy te da y te quita.  Solamente así podrás entender y compartir las palabras de Pablo al decir: tengo todo lo necesario y de sobra.

Oración
Señor: hoy entiendo que tengo mucho más de lo que necesito.  No porque no existan problemas ni tenga dudas sobre mañana sino porque confío en Ti y entiendo que Tú me darás lo necesario para cada día.  Te doy gracias por ello y te pido aprenda a vivir agradecido siempre.  En el nombre de Jesús.  Amén 

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Que linda, reflexión

Un Tiempo con Dios dijo...

Gracias.
No dudes en compartirla!