Entonces una mujer llamada Lidia, vendedora de
púrpura, de la ciudad de Tiatira, que adoraba a Dios, estaba oyendo; y el Señor
abrió el corazón de ella para que estuviese atenta a lo que Pablo decía.  Y cuando fue bautizada y su familia, nos rogó
diciendo: Si habéis juzgado que yo sea fiel al Señor, entrad en mi casa, y
posad.  Y nos obligó a quedarnos.
Primero quiero comentar acerca del momento en que la
mujer estaba poniendo atención a lo que Pablo decía.  Estaba muy interesada.  Por experiencia propia, estoy convencido que
todo su interior estaba con fuego mientras la palabra de Dios era
compartida.  Es un momento
increíble.  A veces son pasajes que ya
habíamos leído varias veces, pero hay algo distinto en ese día que todo
cambia.  ¿Sabes qué pasó?  Que has madurado y que te has enfrentado a
situaciones distintas por lo que hoy tu discernimiento es distinto.  O tal vez estás en un momento específico en
el cual puedes identificarte perfectamente con lo que estás escuchando o
leyendo.
Es interesante ver la reacción de Lidia.  La biblia nos dice que “los obligó” a
quedarse en su casa.  ¡Quería escuchar
más!  ¡Quería conocer más de Dios!  Sus ojos se han abierto y su deseo es
permanecer más tiempo escuchando de las enseñanzas.  Este fervor no lo debemos dejar apagarse en
nuestras vidas.  Ese deseo de obedecer,
de conocer más y de permanecer en Cristo debemos cuidarlo, alimentarlo y
hacerlo crecer.  En ocasiones, el tiempo
pasa y sin darnos cuenta ya estamos a “medio motor”.  Después dejamos de leer o de orar como antes
y así, poco a poco, sin darte cuenta, tu fuego se ha apagado.  ¡No lo permitas!  Incluso si sientes que estás ya lejos de
Dios, esto no es verdad.  Él está ahí
esperando a que des la vuelta y regreses a caminar a su lado.  No dejes que el enemigo te confunda y te haga
pensar que has cometido demasiados errores. 
El sacrificio de Cristo cubre absolutamente todo y su perdón está disponible
para los que reconocemos que hemos pecado.
No sé si llevas poco tiempo de conocer a Dios o varios
años ya.  Hoy quiero animarte a procurar
la actitud de Lidia al buscar aprender más del Señor.  A estar dispuesto a servir y abrir las
puertas de tu casa.  A dedicar más tiempo
a los demás y menos tiempo a ti.  A amar
a tu prójimo como a ti mismo.  A buscar
el reino de Dios y permitir que el Señor transforme tu corazón.  El mundo necesita de Cristo.  Solamente escucha las noticias y te darás
cuenta del gran vacío que hay.  Renueva
tu compromiso.  Revive el fuego de Cristo
en tu vida.
Lidia les rogó y obligó a los discípulos a que
permanecieran en su casa.  Imagina si
todos los que seguimos a Jesús hiciéramos lo mismo.  Apoyando a aquellos que dedican su vida entera
a evangelizar.  Abriendo nuestras casas a
los necesitados.  Dando de nuestro tiempo
y esfuerzo al prójimo.  Sirviendo a Dios antes
que a nosotros.  ¡Sería otro mundo!  Busquémoslo y vivámoslo.
Oración
Padre: hoy entiendo que debo procurar mi comunión contigo y te pido porque
renueves mi corazón y perdones mis pecados.  Quiero cambiar y vivir en servicio a Ti.  Quiero amar a mi prójimo y buscarte todos los días.
 Guíame Señor en este nuevo camino.  Te lo pido en el nombre de Jesús.  Amén
6 comentarios:
GRACIAS A MI DIOS TODOPODEROSO JESUCRISTO !! POR DARME ESTA GRAN DICHA DE CONOCER DE SU BENDITA PALABRA !!! PUES ELLA A LLENADO ESE GRAN VACIO QUE HABIA EN MI VIDA !!! ¡¡ HOY POR SU BENDITA MISERICORDIA !!! ESTAMOS EN PAZ ...¡¡ GRACIAS A NUESTRO AMADO SEÑOR CELESTIAL JESUCRISTO
¡Amén!
Amen lindo mensaje hay que brindarle ese tiempo a Dios buscarlo de corazón amen
¡Exactamente!
Hoy encontré su página, y fue de gran bendición, pues estaba leyendo la biblia y me llamó la atención este versiculo, y quise escudriñar más y aquí estoy, gracias Dios les bendiga.
Amén
Publicar un comentario